PSICOANÁLISIS Y COGNITIVISMO

Definición de psicoanálisis y cognitivismo

• El psicoanálisis es una teoría que intenta explicar el comportamiento de los seres humanos y se basa en el análisis de los conflictos sexuales inconscientes que se originan en la niñez.
•  El cognitivismo es el estudio de la cognición (los procesos de la mente relacionados con el conocimiento), por lo tanto, estudia los mecanismos que llevan a la elaboración del conocimiento.

Diferencias entre psicoanálisis y cognitivismo

El psicoanálisis presenta los siguientes principios:

-Bloqueo de la libido (impulso que estimula y regula el comportamiento sexual de un individuo y se manifiesta de diferentes formas en la actividad de la psiquis).

-Conflicto infantil no resuelto.

-Regresión del yo, ambivalencia que es un estado anímico en el que conviven emociones opuestas.

-Perdidas objétales "duelo y melancolía".

-Posición depresiva, en ella la ansiedad también se siente por el objeto.

                                El cognitivismo presenta los siguientes principios: 

-Los pacientes depresivos presentan distorsiones en algunas partes de su proceso de la información

-Esto provoca distorsiones cognitivas como la triada cognitiva, esquemas y patrones cognitivos sobre los cuales reposan los síntomas de la enfermedad.

Psicoanálisis y cognitivismo

Objetivos del psicoanálisis y cognitivismo

• Objetivos básicos del psicoanálisis:

-Cambio estructural de la personalidad.

-Comprensión de conflictos del pasado y su actualización.

-Visión interna de defensas mediante las cuales el sujeto capta una verdad relevada.

• Objetivos básicos del cognitivismo:  

-Identificar o modificar presupuestos autodestructivos.

-El alivio sintomático es rápido con mejora general, el mismo puede ser limitado, superficial y temporal.

Psicología cognitiva

María Ávila

¿Qué es una distorsión cognitiva? 

Estas se pueden interpretar como una forma de error en el procesamiento de la información. Además, desempeñan un papel predominante en la psicopatología al producir la perturbación emocional.

Estas distorsiones se suelen presentar en forma de pensamientos automáticos con las siguientes características:

• Son mensajes específicos y discretos.
• Están formados por pocas y esenciales palabras o una imagen visual breve.
• Casi siempre son creídos los pensamientos automáticos.
• Se viven como algo espontáneo.
• A menudo se expresan en términos de "habría que, tendría que o debería".
• Tienden a dramatizar y catastrofizar.
• Pueden generar distintas emociones y pensamientos.
• Son difíciles de desviar.
• Son aprendidas.

A pesar de que existen muchas distorsiones cognitivas que sufrimos a diario, nos centraremos en tres:

• Abstracción selectiva o filtraje

Consiste en enfocarse únicamente en ciertos aspectos (usualmente negativos) de un evento, circunstancia o persona con exclusión de otras características.

Se da de forma automática, sin que la persona que lo sufre sea realmente consciente de que quizás le está dando mayor importancia de la que tiene la determinada situación negativa.

Este modo de pensar, al igual que todas las distorsiones cognitivas, no se corresponde con la realidad.

Este tipo de distorsión suele venir ligada a una falta de autoestima que potencia esa visión negativa del contexto.

Se filtra lo negativo, lo positivo se olvida.

Algunas palabras claves para detectar está distorsión son : "No puedo soportar esto" , "No aguanto que" , "Es horrible", " Es insoportable". 

Algunos ejemplos son:

• Una persona se encuentra con un amigo y hablan de muchos temas agradables, sin embargo discuten de política, y al marcharse a casa se siente irritado pensando en las críticas de aquel hacia sus ideas políticas, olvidando los otros temas agradables compartidos.
• Otro ejemplo puede ser que María ha hecho para su cumpleaños una tarta de queso, y ha invitado a nueve amigas. A casi todas les gusta el pastel de María, excepto a Laura que dice que la mermelada que lo cubre no está demasiado buena. María se siente mal y piensa que la tarta es un desastre. (Sólo se ha quedado con lo negativo, ha omitido totalmente los aspectos positivos).

• Afirmaciones de "debería"

Consiste en el hábito de mantener reglas rígidas y exigentes sobre cómo tienen que suceder las cosas. Estas reglas rígidas se piensa que deberían aplicarse sin importar el contexto situacional.

 Las exigencias centradas en uno mismo, favorecen la autocrítica, mientras que las dirigidas hacia los demás favorecen la rabia, la ira y la agresividad.

Cualquier desviación de esas reglas u normas se considera intolerable y conlleva alteración emocional extrema. 

Algunos psicólogos han considerado que esta distorsión está en la base de la mayoría de los trastornos emocionales. 

Los deseos personales derivados de las creencias racionales pueden producir malestar cuando no se consiguen, pero no de manera extrema como las exigencias de los "deberías", que además nos aleja de conseguir nuestros objetivos al marcarnos solo un camino rígido.

Las palabras claves son: "debería de...", "No debería de...”, "Tengo que...”, "No tengo que...", "Tiene que...”.

Algunos ejemplos son:

• Ante un divorcio, la mujer afirma: “Debería haber sido más atenta con mi marido y así no me hubiese dejado”

• Cuando una persona se porta bien con los demás piensa: “Los demás deben actuar bien conmigo”

• Un médico se irritaba constantemente con los pacientes que no seguían sus prescripciones y pensaba: "Deberían de hacerme caso"; eso impedía que revisara sus actuaciones o explorara los factores que podían interferir en el seguimiento de sus indicaciones. 

• Un hombre estaba preocupado excesivamente por los posibles errores que podría cometer en su trabajo ya que se decía: "debería ser competente y actuar como profesional, y no debería cometer errores”.

• Adivinación del pensamiento

Se refiere a la tendencia a interpretar sin base alguna los sentimientos e intenciones de los demás. A veces, estas interpretaciones se basan en un mecanismo llamado proyectivo que consiste en asignar a los demás los propios sentimientos y motivaciones, como si los demás fueran similares a uno mismo. Las interpretaciones no dejan de ser eso, suposiciones, casi siempre existen otras alternativas, y en muchas ocasiones, por más que pensemos y pensemos no adivinaremos lo que realmente ha sucedido. A menudo, forman “versiones” subjetivas de las cosas que nos ocurren que suelen ser bastantes erróneas, en el sentido de dar una falsa imagen o interpretación de los hechos.  

Palabras claves de esta distorsión son: "Eso es porque...”, "Eso se debe a...”, "Se que eso es por...".

Algunos ejemplos son:

• Una persona nota como la miran unos extraños y piensa: "Se que piensan mal de mí". 

• Otra persona está esperando a otra en una cita y esta tarda cinco minutos y sin mediar prueba alguna, se le viene a su cabeza: "Se que me está mintiendo y engañando".

• Creer saber lo que piensan los demás y por qué se comportan de la forma que lo hacen. “Lo que quiere es ponerme nervioso”, “Lo que quiere es reírse de mí”, “Siente pena por mí” o “ella está contigo por tu dinero”.

• Rosa una mujer que dirigía un negocio de ropa, trató de explicarse a sí misma por qué Tomás, su novio, estuvo silencioso al volver de una fiesta. Cuando él se quedó callado, Rosa pensó: “Tomás no dice nada…, debe estar enfadado conmigo”. Al tratar de leer los pensamientos de Tomás, Rosa se mantuvo en silencio y se enfadó. Su Adivinación del Pensamiento no acabó allí. Rosa pensó entonces: “Debo de haber hecho algo que le habrá ofendido”. Al comprobar en su mente que Tomás estaba enfadado por algo que ella había hecho, pensó: “Tomás seguirá enfadado conmigo y a la larga romperá nuestra relación”. Entonces, empezó a preocuparse porque no quería quedarse sola para el resto de su vida.

Pero Rosa era una mujer muy obsesiva. Una mujer diferente, en la situación de ella, podría haber pensado simplemente: “Es probable que a Tomás se le pase esto en unos minutos”. El mero hecho del silencio de Tomás podría corresponder a cualquier otra cosa.

Elisa Criado